3 de diciembre de 2011

Supone una nueva herramienta para prevenir: El grosor de las carótidas incide en los ACV

Científicos internacionales demostraron que el grosor de la pared de la arteria carótida puede determinar el riesgo de repetición de un Accidente Cerebro Vascular (ACV), lo que supone una nueva herramienta para prevenir este tipo de episodios.

Según la nueva investigación, resulta de gran utilidad medir el espesor de las capas íntima y media de la arteria carótida mediante una ecografía, ya que esa medición alerta del riego y, por tanto, sirve como marcador clínico de pronóstico en los ACV y para reducir los índices de mortalidad.

El porcentaje de pacientes que recaen en un nuevo episodio de ACV durante el primer año es del 7 por ciento, cifra que asciende al 15 por ciento si se suman los que sufren episodios cardiovasculares y los que fallecen, según se destaca en la investigación que fue publicada en la revista “Stroke” de neurología.