El domingo 9 de diciembre ppdo., el Centro Vasco “Aurrera” rememoró con los abuelos del Hogar de Ancianos el nacimiento de Jesús. Fue muy conmovedor ya que los abuelos participaron en el pesebre y se los notó muy felices. El niño Jesús fue personificado por una preciosa beba de 4 meses de edad cuyo nombre es Ainoha (dicho nombre en el País Vasco es venerado por pertenecer a una virgen del lugar). Fue muy emotivo el canto de Fernando Beyer que acompañó el relato de Roberto Divietri.

Integrantes del Centro Vasco, con sus trajes típicos y una abuelita del Hogar, fueron los pastores. Fue una tarde inolvidable evocando aquellas navidades en la que nuestros abuelos nos contaban historias y costumbres de ese lugar tan querido y añorado al que nunca pudieron volver, pero sí transmitir sus costumbres y tradiciones a sus descendientes.

Nos sentimos orgullosos, como nietos de vascos, de esa raza noble y generosa. Muchas felicidades a la colectividad vasca que sigue las costumbres de sus ancestros.