Quiero comentar en esta nota lo que nos sucedió en el último viaje con destino a Mar del Plata en el mes de diciembre del corriente año.

Por ende voy a denunciar públicamente al Centro de Jubilados y Pensionados de nuestra localidad por el maltrato sufrido constantemente por sus miembros que paso a nombrar a continuación y el detalle de los mismos: Mirta Fernández y Bartolomei, que no recuerdo su nombre.

Pagamos con anticipación y por adelantado el viaje aproximadamente 15 a 20 días antes de lo previsto los cuales eran 2, mi hermana Dora Bechtholt y yo Norma Bechthol que de hecho paso a contar que 8 días antes de la partida estuve muy mal con un problema de salud lo cual me derivo a un médico y por ende pregunte al Centro si podía rescindir el viaje ya que era un problema ajeno a mí y ellos respondieron que no se podía y alegaron no devolverme el dinero y tenía que vender el viaje por mis propios medios. Pregunta: ¿es necesario que un jubilado y siendo una persona mayor tenga que sufrir atropellos por parte de gente incompetente? Pues no, y eso fue el principio de nuestro calvario porque cuando llegamos a destino y de modo inadecuado nos dijeron que teníamos que compartir habitación con otra persona que no conocíamos imponiéndonos reglas que no figuraban en el paquete del viaje.

A todo esto defendimos nuestra posición reclamando habitación para nosotras dos solas que era lo que nos correspondía por pagar un viaje de placer y no de malestar. A partir de ahí comenzaron las agresiones, discriminación hacia nuestras personas, el hombre se tornó impaciente y comenzó a gritarnos delante de todos los presentes con insultos mostrándose maleducado y agresivo.

Quisiera recordarles a Mirta Fernández y su guardaespaldas que hace 29 años que estamos en democracia y bien merecida la logramos para que ustedes con sus actitudes violentas, impuestas y patoteriles nos vuelvan a llevar a esa época que tanto nos costó desterrar…,

De allí y negándonos rotundamente a sus decisiones mal tomadas nos dirigimos a Mabel Blanco coordinadora general de la Empresa Pedraza Turismo quien nos propuso pagar un plus de $90 para poder estar solas y como queríamos estarlo lo pagamos, la idea era pasar unas lindas vacaciones y estas se convirtieron en un infierno en tan poco tiempo gracias a estas personas ya nombradas anteriormente y la mayoría de la tripulación (no todos) que allí acompañaban y festejaban con risas y burlas siguiendo el juego de los mismos.

Quiero a partir de todo lo expuesto que alguien intervenga y de una solución a nuestro problema por daños morales y psicológicos siendo nosotras dos personas mayor edad.

Por favor quien lea esto acompáñenos para que otros jubilados no tengan que pasar lo que nos paso a nosotras.

Muchas gracias

Norma Bechtholt

Malabia 870