Dislexia: no es una barrera de aprendizaje

(NOTA CON AUDIO): Luis Tobares, Director General de Política de Familia, comentándonos sobre la Jornada de Concientización sobre Dislexia y dándonos más detalles sobre el desarrollo de su área de trabajo.

Mañana en el Centro Universitario 8.30 de la mañana estamos organizando esta jornada sobre concientización sobre dislexia. Están invitados docentes, directivos y equipos de escuelas. Los esperamos a todos”.

¿Qué es la dislexia y de dónde nace esta propuesta? El Director General de Política de Familia nos decía: “La dislexia es un trastorno específico del aprendizaje que afecta la capacidad de lectura y comprensión lectora de la persona. La persona sustituye algunas palabras cortas o las invierte. Puede aparecer en la infancia y continuar durante toda la vida. Es un trastorno que no tiene cura pero sí tratamiento.

Esa persona es una persona con coeficiente normal, tiene un desarrollo normal en todas las áreas pero no lo tiene a la hora de leer. Históricamente esos chicos terminaban repitiendo porque pensaban que era un problema del chico por no saber leer.

Una vez diagnosticado lo que se hace es la adaptación de los contenidos. Como es alguien que entiende bien, se hace la explicación de manera oral. En nivel universitario se desgravan las clases por videos de Youtube. Hay formas de adaptar los contenidos. Ese es el desafío del docente también.

La dislexia no es una barrera de aprendizaje”.

¿Cómo viene en general el área de política de familia? ¿Qué es lo que vienen planificando?

“A nosotros cuando el Intendente nos transmitió la idea de ser un municipio de puertas abiertas tiene que ver con esto; que la demanda no llegue a nosotros sino salir a buscarla. Estar en contacto con la gente.

En lo que es derechos del niño y otras áreas lo primero que hicimos fue ponernos en contacto con diferentes actores sociales que, según lo que me transmitían ellos, en estos años no habían sido tenidos en cuenta. La idea es empezar a trabajar con las distintas ONG para hablar sobre las diversas políticas que queremos llevar a cabo en Baradero.

Hay una parte del conocimiento que lo tienen ellos y otra parte que la tenemos nosotros: en el dialogo nos vamos a enriquecer los 2.

Creemos que como Estado no somos dueños de la verdad, tenemos que respetar otras opiniones y nos pasa por ejemplo con las escuelas. Ellos saben de los chicos más que nadie porque conviven continuamente con ellos. Por una cuestión de masividad no podemos hablar con cada docente pero sí con los equipos, directivos, inspectores.

La idea es abrirnos a escuchar las demandas y tomar eso como desafío para que marque nuestro camino”.