Laura Savoy, integrante de Atención Primaria de la Salud de nuestra ciudad, estuvo en LS2 Radio Baradero, con su columna de los lunes hablando de salud, el tema de hoy fue el tabaquismo… laura savoy

El tabaquismo es la principal causa prevenible de mortalidad en el mundo. “Este año más de cinco millones de personas morirán por ataque cardiaco, accidentes cerebro vasculares, cáncer, dolencias pulmonares u otras enfermedades relacionadas con el tabaco”, según estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En ese número no están incluidas las más de 600 mil personas, de las que más de una cuarta parte serán niños, que morirán por haber estado expuestos al humo de tabaco ajeno. El número de muertes que se cobra cada año la epidemia global de tabaquismo podría alcanzar los ocho millones en 2030. Después de haber matado a 100 millones de personas en el siglo XX, los pronósticos aseguran que, el tabaquismo podría acabar con 1,000 millones de vidas durante el siglo XXI.

Los fumadores corren un mayor riesgo de adquirir una variedad de padecimientos crónicos. Entre ellos se incluyen la aterosclerosis (acumulación de grasa en las arterias), varios tipos de cáncer y enfermedad pulmonar obstructiva crónica. La aterosclerosis es una de las causas principales del alto número de fallecimientos por tabaquismo. En varios estudios se describen los hechos indicativos de que el tabaquismo es una causa importante de las enfermedades corononarias, lo cual conduce a un ataque cardíaco.

La situación ha alertado a los profesionales de la salud que trabajan con la temática, entre ellos, el doctor Samuel Ramos, de la Fundación Dominicana de Obesidad y Prevención Cardiovascular, y el Centro de Obesidad y Enfermedades Cardiovasculares, quien con la colaboración de instituciones afines, realizaron la pasada semana una jornada para concienciar sobre la problemática, con la distribución de literatura en diferentes puntos de la ciudad y conferencias en distintos centros médicos de esta ciudad.

El cardiólogo habló de la influencia del tabaquismo para contraer enfermedades coronarias. “Fumar es el factor de riesgo más importante para hombres y mujeres jóvenes. Produce un mayor riesgo relativo en personas menores de cincuenta años de edad que en aquellos que son mayores de esa edad”, afirmó.

El consumo de tabaco causa la cardiopatía, no sólo en personas que fuman cigarrillos u otros productos de tabaco, sino también en los no fumadores que están expuestos al humo de tabaco. El humo de segunda mano es la combinación de los humos emitidos por la punta de un cigarrillo encendido u otro producto de tabaco fumado y el humo exhalado por el fumador.

Los no fumadores

Éstos respiran el humo de segunda mano cuando están en lugares donde los productos del tabaco se fuman. El humo de segunda mano aumenta el riesgo de la cardiopatía isquémica en los no fumadores entre 25% y 30%. Este aumento de riesgo es evidente incluso en los bajos niveles de exposición.

El humo de segunda mano puede provocar ataques cardíacos, esta exposición puede causar episodios coronarios agudos. Es biológicamente plausible que incluso una exposición relativamente breve al humo de segunda mano puede desencadenar un episodio coronario agudo. De los más de mil millones de fumadores que hay en el mundo, el 20% son mujeres; sin embargo, esta cifra va en camino de aumentar. Las tasas de tabaquismo de los hombres han alcanzado su punto más alto, mientras que las de las mujeres siguen aumentando. Las mujeres constituyen un importante blanco de oportunidad para la industria tabacalera, que necesita captar nuevos consumidores para remplazar a casi la mitad de los consumidores actuales, que morirán prematuramente por enfermedades relacionadas con el tabaco.

Al doctor Ramos le resulta especialmente perturbadora la prevalencia cada vez mayor de consumo de tabaco entre las niñas. “En un informe reciente, Las mujeres y la salud: los datos de hoy, la agenda de mañana, se aportan pruebas de que la publicidad del tabaco se concentra cada vez más en las niñas. Los datos de 151 países indican que alrededor del 70% de las adolescentes fuman cigarrillos, frente al 12% de los chicos de la misma edad”.

A lo largo del siglo XXI, el consumo de tabaco podría matar a más de 1,000 millones de personas. En consecuencia, reconocer la importancia de reducir el consumo de tabaco de las mujeres y actuar en ese sentido, salvaría muchas vidas.