En el mes de febrero una persona muy conocida de Baradero cumplió el aniversario número cincuenta, ligado a lo que es la actividad futbolística local, ya sea como auxiliar en el Club Sportivo o en la Selección de la Liga, lo que genera un acontecimiento histórico para su persona y en definitiva también para el fútbol de esta ciudad, pues no es muy común que alguien complete una trayectoria casi ininterrumpida durante cinco décadas, nada menos.
Desde este espacio felicitamos y deseamos que tenga un muy feliz aniversario, al querido José “Pájaro” Wirz, quien desde el mes de febrero de 1963 hasta este febrero de 2013, supo mantenerse junto a un campo de juego realizando la tarea de asistente como masajista y utilero, además de otras tareas anexas, las que ha sabido desempeñar con mucho acierto, este gran personaje del fútbol, tanto en el banco de Sportivo como en el liguista, algo que seguramente ha originao un sinfín de historietas y anécdotas, las que seguramente enriquecieron la frondosa historia de nuestro fútbol, la cual permanece cargada de nostalgia y recuerdos, de los lindos y no tan lindos, pero muy valederos por cierto, ya que en su haber Wirz ostenta muchos logros de campeonatos y vueltas olímpicas con La Franja, además de acompañar grandes campañas realizadas por varios combinados de la liga.
Por lo que ahora se está generando una linda recordación con José Wirz, al cumplir 50 años ligados al deporte más popular de los argentinos, lo que “no es moco e pavo, che…”.
Gracias, José, por tanta dedicación y buena onda al lado de los equipos que asististe durante estos cincuenta años.
La foto del recuerdoSportvo “Campeón” año 1974 – De pie (De izquierda a derecha): José (Pájaro) Wirz, Julio (Cebollín) Malacalza, Hugo (Manopla) Duero, Carlos (Carli) Hernández, Guino Lacerna, Ricardo (Gata) Simour, José Vaccareza, Angel (Tito) Lonfat y José (Cacho) Pavón. Hincados (De izquierda a derecha): Orlando Crepín, José Canale, Ramón “Chichino” Bardesono, José “Cabezón” Jeanerett, Sebastián “Villeguita” Villegas, Carlos “Chino” Casas y Orlando “Nano” Sánchez.
Autor: Miguel A. Di Vietri
