Ayer por la tarde, tras el alerta recibido por la Policía Comunal de parte de algunos vecinos que fueron robados en la calle, efectivos de la repartición, realizaron una pronta investigación con los datos brindados por los propios denunciantes logrando dar con los tres malvivientes, dos hombres oriundos de la localidad de San Nicolás y una mujer con domicilio en nuestra ciudad.

Los delincuentes, que se movilizaban en un automóvil Ford Fiesta color azul con dominio AQX 510, en poco más de dos horas durante la tarde ayer mediante intimidación con arma blanca, arrebataron no menos de seis carteras a indefensas mujeres mayores que transitaban por la calle, dándose posteriormente a la fuga.

Algunos de los hechos

Una de las damnificadas, de 26 años que circulaba en bicicleta en la esquina de las calles Cabrera y Emilio Genoud, fue encerrada por el vehículo y cuando la mujer cayó al piso mediante la intimidación de un arma, le quitaron la cartera con todas sus pertenencias y se dieron a la fuga para, minutos después, perpetrar otro arrebato en calle Colombres al 1100 a una mujer de 60 años.

La detención

Cuando los malvivientes se dieron cuenta de la presencia policial intentaron huir, pero tras una persecución de diez cuadras y merced a un operativo cerrojo en calle Santos Vega al 1500, entre Medrano y Gallo, los efectivos policiales lograron interceptarlos y aprehender a los delincuentes que fueron identificados como José Antonio Gabriel, de 23 años, Guillermo Tirado, de 27 años, ambos con domicilio en San Nicolás, y una mujer con domicilio en Baradero. En el lugar se hizo presente la auxiliar letrada de la UFI Nº 8, abogada Natalia González, quien impartió las directivas pertinentes. Los aprehendidos fueron notificados del delito cometido según el artículo 60 del Código Procesal Penal y hoy deberán ser conducidos a sede judicial para prestar declaración.

El botín

Cuando fueron capturados a los tres malvivientes le fueron secuestrados varios teléfonos celulares, carteras con documentación, dinero en efectivo, unas tijeras, una barreta de mano y anteojos entre otros elementos.

A pocos minutos de haber sido detenidos y llevados esposados a la sede policial con todos los elementos secuestrados, incluso el automóvil en el que se conducían los ladrones, muchos damnificados se hicieron presentes para radicar la denuncia y reconocer sus pertenencias. Otros, que sufrieron el mismo accionar pudieron encontrar documentación y llaves en la calle, dado que los delincuentes tras robar, se descartaban rápidamente de lo que no les servía.