En relación con la reciente gacetilla enviada a su medio referente al “24 de octubre: Día Mundial de la Poliomielitis”, me gustaría señalar que el mundo se encuentra a punto de eliminar la polio, una de las enfermedades más devastadoras de la historia.
El esfuerzo internacional para la erradicación pone de manifiesto la enorme eficacia de las vacunas. En la década de 1980, la polio paralizaba a más de mil niños cada día, pero hoy el número de casos ha descendido más de 99%, quedando solo tres países (Nigeria, Afganistán y Pakistán) donde nunca se ha logrado detener la transmisión del poliovirus salvaje.
Sin embargo, un importante déficit presupuestario ha supuesto la interrupción de campañas de vacunación en países en riesgo, lo que pone en peligro a millones de niños. Si no logramos erradicarla de una vez, la polio podría resurgir e infectar a 200.000 niños cada año.
Rotary es una organización de servicio humanitario con más de 34.000 clubes en 200 países y regiones geográficas que hizo de la erradicación de la polio su prioridad absoluta en 1985. Desde entonces, Rotary ha aportado a la causa 1.200 millones de dólares y un sinnúmero de horas de trabajo voluntario para inmunizar a más de 2.000 millones de niños en 122 países.
Si logramos la erradicación de la polio, demostraríamos que podemos erradicar muchas otras enfermedades. Nos encontramos ante una ocasión histórica de gran trascendencia que no podemos desaprovechar.
Cuando el mundo trabaja unido por una causa común se pueden alcanzar grandes metas. Y es precisamente gracias a esta unión que estamos a punto de derrotar a la polio. Los lectores que deseen unirse a esta lucha pueden hacerlo visitando http://www.endpolionow.org/es.