La Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó que ocho millones de personas morirán cada año hasta 2030 a causa del tabaco si continua la tendencia actual de su consumo en todo el mundo.
Aproximadamente el 80% de estas muertes prematuras tendrán lugar en los países de ingresos más bajos, según se afirma en un informe de la OMS sobre el tabaco presentado en Ginebra.
“En el transcurso del siglo XXI, el tabaco podría llegar a matar 1.000 millones de personas si no se toman medidas urgentes”, advierte el informe.
Por ello, la OMS puso en marcha en 2008 la Convención Marco para el Control del Tabaco, que propone medidas a los países para reducir el consumo de tabaco (denominadas medidas MPOWER), como la creación de zonas libres de humos, las advertencias gráficas en los paquetes, la prohibición de la publicidad, el aumento de los impuestos al tabaco o las campañas de concienciación.
Según el informe de la OMS, el 55% de la población mundial, alrededor de 3.800 personas, están cubiertas por al menos una medida MPOWER y 1.100 millones de personas (el 17% de la población mundial) están protegidas por políticas completas de prevención del tabaco desde 2008.
La OMS asegura que se han hecho avances en todas las áreas y que ya son 30 los países que han incluido en sus legislaciones alguna medida contra el tabaco.
Medidas recomendadas
Exigir el uso de advertencias sanitarias gráficas de gran tamaño en los envases de productos de tabaco es una de las seis medidas de reducción de la demanda recomendadas por la OMS. Las otras medidas son vigilar el consumo de tabaco; proteger a la población del humo del tabaco; ofrecer ayuda para dejar el tabaco; hacer cumplir las prohibiciones sobre publicidad, promoción y patrocinio del tabaco; y aumentar los impuestos sobre el tabaco.
Cada medida corresponde por lo menos a una disposición del Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco, del que ya son Partes más de 170 Estados y la Unión Europea (Argentina aún no adhirió).
Las campañas mediáticas de concienciación sobre los peligros del tabaco, la última propuesta MPOWER de la OMS, se llevaron a cabo en 23 países entre 2009 y 2010 y llegaron a 1.900 millones de personas, el 28% de la población.
Para la OMS, el mayor progreso se ha conseguido en la inclusión de advertencias sobre los daños en los paquetes, medida que desde 2008 protege a 458 millones de personas más, más del doble de la población cubierta por esta medida antes de esa fecha.
Además, el número de personas protegidas por leyes que prohíben la publicidad de marcas de tabaco aumentó en 80 millones desde 2008; mientras que la población cubierta por leyes que declaran todos los espacios públicos y los centros de trabajo como zonas libres de humos creció en 385 millones de personas en ese periodo.
Además, 100 millones de personas más se han visto protegidas en los últimos dos años por leyes más ambiciosas que regulan espacios sin humos adoptadas en el ámbito regional.
Los servicios médicos para ayudar a la gente a dejar el tabaco benefician a 76 millones de personas más en todo el mundo desde 2008.
Respecto a la propuesta de la OMS de situar el impuesto del tabaco como mínimo en el 75 por ciento de su valor de mercado, el informe señala que la medida afectaría hoy a 115 millones de personas más que en 2008.
Sin embargo, y a pesar de los avances en la implantación de estas medidas, la OMS explica que los Gobiernos recaudan en la actualidad 133.000 millones de dólares (93 millones de euros) por los impuestos al tabaco, pero que gastan menos de 1.000 millones (700 millones de euros) en la prevención de su consumo.
La OMS recordó que el tabaco ya mata a cerca de 6 millones de personas cada año y causa pérdidas multimillonarias a los Estados por los tratamientos médicos necesarios para las enfermedades provocadas por el tabaco.