El precio de los combustibles representa este año un duro golpe al bolsillo. El 2014 arrancó con una suba del 7 por ciento y todos los meses los argentinos se encuentran con un nuevo incremento.

En mayo, el ajuste será de 3,8 por ciento. El litro de nafta súper costará casi $14 en las estaciones de servicio Shell, mientras que en las de YPF y Axion (ex Esso) superará ese valor. En el caso de las líneas premium, en la mayoría de las marcas rondará los $15 el litro y el gasoil costará más de $10 la D-500, y más de $14 la D-Euro.

Será el quinto incremento consecutivo en lo que va del año. Las petroleras subieron el valor del litro de los combustibles un 7 por ciento en enero; un 6 por ciento en febrero; 6,1 en marzo y un 5,4 por ciento en abril. Con la suba de mayo, el aumento alcanza un total del 28,3 por ciento.

El nuevo retoque forma parte del acuerdo entre el Gobierno y las petroleras, que tuvo como objetivo impedir una suba “abusiva” días después de la fuerte devaluación que convalidó el Ejecutivo a principios de año.