El gobierno argentino firmó una carta de intención para avanzar en el ingreso al Visa Waiver Program.

Este lunes, el presidente Javier Milei firmó junto a la secretaria de Seguridad de Estados Unidos, Kristi Noem, una carta de intención que marca el inicio del proceso para que los argentinos puedan ingresar al país norteamericano sin necesidad de una visa de turista.

El embajador argentino en Estados Unidos, Alec Oxenford, destacó: “Lo que hemos iniciado no es un anuncio simbólico, sino un proceso técnico real y exigente”.

También participaron del encuentro en Casa Rosada:

• El canciller Gerardo Werthein.
• La ministra de Seguridad Patricia Bullrich.
• El jefe de Gabinete de la Secretaría de Seguridad de EE.UU., Corey Lewandowski.
• La encargada de Negocios en Buenos Aires, Heidi Nicole Gómez.
• El asesor Robert Thomas Law.

Oxenford aclaró que aún no se otorgó el beneficio, pero se inició el trabajo conjunto con los equipos técnicos estadounidenses.

Según explicó: “La posibilidad de avanzar hacia la exención de visado es una expresión concreta del excelente vínculo entre el presidente Milei y el presidente Trump”.

Además, remarcó que el programa se viene trabajando desde hace meses con el Departamento de Seguridad Nacional y el Departamento de Estado de EE.UU.

Desde el lado argentino, se conformó un grupo de trabajo interinstitucional que incluye a:

• Cancillería
• Ministerio de Seguridad
• Vicejefatura del Interior
• Embajada argentina en Washington DC

Kristi Noem expresó que su objetivo es que la Argentina sea incorporada al programa “lo antes posible”, aunque advirtió que difícilmente eso ocurra en menos de un año.

Argentina ya había formado parte del Visa Waiver Program en los años 90, pero luego perdió ese beneficio. Actualmente, los ciudadanos deben realizar trámites largos para obtener la visa B1/B2.

Con este nuevo proceso, si se aprueba, los argentinos podrían ingresar a EE.UU. por turismo o negocios por hasta 90 días sin visa, gestionando una autorización electrónica a través del sistema ESTA.

Desde el Gobierno aseguran que este avance no solo facilitaría los viajes, sino que también mejoraría la reputación internacional del país y reforzaría la atracción de inversiones.