Aunque muy viejas, algunas cosas no pierden su eficacia para graficar situaciones. Cuando alguien quiere significar que algo va para tan largo que resulta eterno, se dice que la situación es como “el cuento de la buena pipa” y hubo y hay comerciantes que han colocado en sus locales de venta el consabido cartel anunciando: “Hoy no se fía, mañana sí”. Traemos a colación estas cosas porque nos las recuerda lo que ocurre con la pavimentación del camino a Ireneo Portela acerca de cuya concreción podríamos decir que es como “el cuento de la buena pipa” o que le han colocado un cartel indicando que “Hoy no comienza, mañana sí”.

Sabemos que muchos habitantes de esa villa han perdido ya las esperanzas y existen los que nunca creyeron que se haría y se jactan de sus presagios ante sus vecinos.

Les hemos preguntado muchas veces del tema a quienes deberían saberlo y las respuestas han sido siempre a futuro incierto: “La semana que viene tendría que empezar” o “Nos reunimos con el contratista y acordamos que empezaba la semana pasada, pero no vino”. Así fue desde el inicio mismo de los trabajos, la pavimentación del camino a Ireneo Portela se parece mucho más a una comedia de enredos que a la importante obra de infraestructura que significa para Baradero en general y para I. Portela en particular.

Nos imaginamos a Ricardo Morales cansado de poner la cara todos los días antes los vecinos que le reclaman por el comienzo de los trabajos eternamente postergados. Es tan probable, a esta altura, que muchos porteleros ya no le digan nada a Morales para no mortificarlo, como que sea el propio delegado comunal quien trate de esquivar a algunos que reconoce por su insistencia en el reclamo.

Si los habitantes de Ireneo Portela alguna vez, dejando de lado su habitual mansedumbre, se manifestaran, probablemente el Dr. Carossi  no dudará en acusarlos de impacientes, pero, nadie sería más culpable de ello que el mismo Municipio, ya que, teniendo a su disposición todos los medios de difusión de la ciudad, permite que la marcha de los hechos sea desconocida por la población y que, en consecuencia, surjan toda clase de conjeturas, aún las más inverosímiles, pero que tienen su asidero en la nula información que  suministra. Sabiendo lo que pasa con claridad, no comenzará la obra más temprano, pero la población tendrá el convencimiento de que se la tiene en cuenta.

La calidad de vida de un buen número de personas de nuestro partido depende de la pavimentación de este camino y si no baste con recordar que hubo una persona al menos que falleció mientras era trasladada a nuestra ciudad a raíz de la demora sufrida por una ambulancia a consecuencia del pésimo estado de la ruta.

Lo único que se hizo fueron unos escasos metros dentro del poblado.

El camino ya no puede estar peor: no le queda sitio para ello.