Metidos en casa, sin hacer mucho ejercicio, con ansiedad por la situación que vivimos a causa del coronavirus corremos el riesgo de comer compulsivamente y romper la dieta. Para hablarnos al respecto, dialogamos con la Lic en Nutrición, Soledad Laiolo.
“He tenido varias consultas en estos días por la alteración de los hábitos que pueden llevar a un incremento de peso.
Primero hay que planificar y organizarse. No solo a las comidas sino también a los horarios.
Los chicos nos van a clases, la gente trabaja desde casa o no lo hace y eso altera toda la rutina. Saltean el desayuno, hacen un almuerzo rápido, etc.
Lo principal es planificar horarios en el día, lo mismo si estuviésemos en una rutina normal. Las 4 comidas son importantísimas para tener un correcto aporte nutricional y calórico en el día y además para controlar la sensación de hambre. Cuando aparecen esas ganas de comer hay que evaluar en qué momento de la tarde estamos, si son las 4 de la tarde podemos adelantar un poco el horario de la merienda. Hay que medir las porciones de lo que estamos comiendo. Porque nunca registramos verdaderamente lo que comemos.
El cerebro está en una situación disconforme y necesita placer, el que le da la comida.
Por eso comemos fueron del horario normal, no es hambre real. Es hambre para saciar esa sensación que estamos teniendo.
La recomendación es que igualmente sigamos moviéndonos, hacer actividad física no es solamente salir a caminar. Hay clases de baile online, hay gimnasios subiendo clases personalizadas. Eso nos va a ayudar a gastar energía. Si no estoy saliendo a trabajar ni a gastar energía, esa energía se guarda. Ahí es cuando comemos”.