Antes de hablar de agresiones de perros a sus dueños, tendríamos que saber ¿qué es un perro? Parece una pregunta muy simple, pero casi nadie sabe responderla correctamente.

Entonces, ¿cómo educaremos eficazmente a nuestro perro si no sabemos que es?

¿Qué es un perro, entonces? Un perro es un predador carnívoro que el hombre ha domesticado hace 10,000 años para diversos fines.

Hay que dejar en claro que los perros son altamente sociables con los humanos, y genéticamente, no está inserta la agresión natural hacia nosotros, si así fuese, nadie podría tener perros.

La agresividad en los perros, principalmente en aquellos considerados razas peligrosas, se debe en un 99% a causas humanas, principalmente a la mala educación, muy raramente se da en un ejemplar equilibrado emocionalmente y bien educado.

Específicamente en el caso del APBT (American Pit Bull Terrier) fue modificado genéticamente para ser un perro de pelea, su carga genética está preparada para agredir a otros de su especie, pero jamás a un ser humano. Sin embargo se puede educar y lograr la convivencia de un APBT con otros animales, siempre y cuando la persona que esté a cargo de hacerlo, tenga presente que está trabajando con cargas genéticas. Un APBT es un perro muy sociable y no califica para perro de guardia, es un perro fuerte y ágil, pero si ha recibido una correcta educación, es extremadamente dócil con los adultos y niños que convive.

Nunca hay que olvidarse de que es un perro, un animal y por lo tanto puede tener comportamientos instintivos, especialmente en épocas de celo, lactancia, preñez. Eduquemos a nuestro perro y también aprendamos a respetarlo por más dócil que nos parezca.

¿Cómo se manifiesta la agresión y por qué suelen atacarnos?
1- Agresiones imprevistas: la mayoría suelen sucedernos con perros conocidos.
2- Agresiones por competitividad o dominancia: el perro necesita saber quien es su líder, no va a dejar que un extraño o alguien que no considere su superior le dé órdenes, por lo tanto no demos órdenes a un perro que no conozcamos bien, y tampoco lo molestemos si está durmiendo, comiendo o jugando con algún objeto.
3- Agresión territorial: el perro demarca su territorio, de forma que lo que para nosotros es algo natural, para nuestro amigo es una invasión en toda regla. Mirar a un perro fijamente a los ojos, puede llegar a ser interpretado como una provocación a pelear.
4- Agresión por miedo: debe ser manejada desde el primer día que el perro está en la casa, debe comprender que no somos rivales, sino sus líderes, que no representamos ningún riesgo para él, que somos quienes le proporcionamos su alimento por el cual subsisten.
5- Agresión por rivalidad y/o celos: nosotros somos los líderes para ellos y todos los ejemplares querrán estar a nuestro lado para asegurarse un lugar de privilegio al lado del líder, lo cual les garantiza la supervivencia. El perro puede agredir a un miembro que considere inferior a el jerárquicamente.

POR MEJOR EDUCACIÓN QUE TENGAN NUESTROS PERROS, DEBEMOS RESPETARLOS Y ENTENDER SUS COMPORTAMIENTOS E INSTINTOS BÁSICOS, ¡SIEMPRE! LOS VÍNCULOS Y JERARQUÍAS CON NUESTROS PERROS JUEGAN UN PAPEL VITAL, RECUERDEN QUE MEDIANTE UNA CORRECTA EDUCACIÓN, RESPETO Y SOCIALIZACIÓN, LA CONVIVENCIA SERÁ ARMONIOSA.
ACTITUD ANIMAL BARADERO

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silvia barroso